Carolina Reyes, madre de Víctor, uno de los niños beneficiados con el programa Rotary: “Este operativo me da la satisfacción como madre de poder ayudar a mi hijo”

Friday February 7th, 2020  I  Compartir:   

Aunque Carolina Reyes se radicó en la VI Región, no dudó en viajar a Iquique y acudir nuevamente con su hijo al programa “Sonríe con Rotary”, para ser sometido a una intervención reconstructiva. El operativo médico es liderado por Rotary Club Iquique y cuenta con el apoyo de Collahuasi.

Ver a un hijo disfrutando plenamente de las distintas experiencias que aportan la infancia y la adolescencia, es una de las mayores alegrías de una madre. Sin embargo, la historia del pequeño Víctor Santos dista mucho de aquello.

Desde su nacimiento en el Hospital de Iquique hace 12 años, Víctor presentó una serie de patologías, siendo una de ellas el síndrome de Moebius, que consiste en un problema neurológico congénito que causa una parálisis facial de por vida, que imposibilita realizar movimientos tan comunes como reír o fruncir el ceño.

A esta enfermedad, se suman otras complicaciones de salud que tiene como hipoacusia o pérdida de la audición, estrabismo, malformaciones en ambas orejas –conocida a nivel médico como microtia-, y problemas mandibulares, de encías y dentales.

Su madre Carolina Reyes reconoce que la vida no ha sido fácil, pero afirma que no claudica en encontrar respuestas y soluciones que proporcionen bienestar a su pequeño. Y, en ello, el apoyo de especialistas médicos ha resultado esencial para su hijo, quien a su corta a edad ha ingresado a un quirófano en varias ocasiones.

Volver a Sonreír

“Sonríe con Rotary” es una nueva luz de esperanza para 30 pacientes este año, y uno de ellos es Víctor, quien al igual que el año pasado fue nuevamente sometido a una operación para corregir la microtia en una de sus orejas, la cual se realizó el 6 de febrero. “Este operativo ha ayudado enormemente a mi hijo, porque cada año damos un paso más en su recuperación y en reforzar su autoestima. Me siento contenta con todo lo que ha hecho Rotary, el Hospital, el Servicio de Salud y Collahuasi por él”, afirma.

Las transformaciones estéticas en Víctor han sido tan favorables, que Carolina admite que él ha mostrado pequeños cambios positivos en su personalidad, dejando atrás paulatinamente el temor al que por años sucumbió, a raíz del rechazo social que sufrió más de una vez por su aspecto físico que lo llevaban a ser retraído y melancólico.

Llegar a esta instancia este año no fue sencillo para esta madre y su hijo, pues por motivos personales se vieron obligados a radicarse en Machalí el año pasado. Pero, gracias al apoyo otorgado por el municipio de la comuna, pudo contar con los recursos para asistir al operativo y continuar con los controles médicos. “Viví 21 años en Iquique y fue un momento muy complicado separarme de su papá, pero estamos aquí porque este operativo me da una satisfacción como madre de poder ayudar a mi hijo. Mi gran sueño es verlo reír y feliz, sin tener que estar ocultándose o mantenerse en silencio para evitar que se burlen de él”, recalca.